Siendo muy joven, Andrés y sus hermanos tuvieron que huir de Hungría, después de que su padre Vazul, descendiente de Arpad, fuese cegado y ejecutado por orden de su primo, el rey Esteban , puesto que Vazul no consideraba a Pedro Orseolo legítimo sucesor al trono magiar.
Andrés y sus hermanos Bela y Levente vagaron por Europa Oriental, pasaron un tiempo en Polonia y de ahí se trasladaron al Gran Principado de Kiev. Allí encontró Andrés el amor, en la persona de Anastasia, hija del príncipe Yaroslav I el Sabio.
El reino húngaro tras la muerte de Esteban I no lograba consolidarse, a los enfrentamientos entre Pedro Orseolo y Aba Samuel , había que añadir el descontento de parte de la nobleza del país y las apetencias que el emperador Enrique III tenía sobre el reino, y el estallido de continuas revueltas paganas, que pretendían restablecer antiguos cultos magiares. Andrés y su hermano Bela decidieron regresar a Hungría e intentar pescar en aguas revueltas.
Abandonaron el exilio, se unieron a los descontentos e insurrectos, se enfrentaron a Pedro Orseolo, al que derrotaron y posteriormente cegaron (método común para incapacitar a los reyes). Una vez vencido el rey, los hermanos se dedicaron a eliminar a todos los sublevados incómodos, y en 1046 fue coronado rey Andrés.
Siguiendo la política de Esteban, Andrés I se acercó al Papado y y luchó contra los paganos, en defensa de la fe católica. El otro problema al que tuvo que enfrentarse Andrés fue a Enrique III, que quiso hacer valer sus derechos feudales sobre Hungría. En las luchas contra el alemán, Bela fue un poderoso aliado, y tras varias derrotas Enrique III renució a la conquista, hicieron las paces y la refendaron casando al hijo de Andrés, Salomón, con la hija de Enrique, Judith.
Andrés I coronó a su hijo Salomón, aportando de la sucesión a su hermano, quien muerto de celos se alió con rusos y polacos, reunió un ejército y derrotó al rey en una batalla cerca del río Tisza. Andrés murió de las heridas y Bela se convirtió en Bela I.
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