Miguel Pselo fue testigo directo de la vida palaciega bizantina del siglo XI y autro de una Vida de los Emperadores. En esta obra, Miguel Pselo relata las intrigas, el odio y las traiciones que eran moneda común en la convulsa corte del Imperio Bizantino. Además, el propio Pselo, notable intelectual, pensador, poeta, y si era menester, intrigante pragmático, es protagonismo mismo de la historia que escribe.
Vivió la mayor parte de su vida en la corte, donde ejerció gran influencia sobre algunos emperadores gracias a su verborrea, cinismo, capacidad para medrar bajo cualquier circunstancia y la habilidad innata de deshacerse de todos sus rivales. Conocido como “el Voltaire bizantino” su erudición no tenía parangón en la época y su obra recoge todos los géneros imaginables de conocimiento humano; metafísica, derecho, poesía, astrología, ciencia, alquimia, historia, teología, matemáticas e incluso demonología.
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