Los dacios, indomables
guerreros de los montes Cárpatos, fueron uno de los últimos pueblos
sometidos por Roma. Después de varias guerras duras y costosas,
Trajano consiguió completar la conquista de la Dacia transdanubiana,
a grandes rasgos la Rumanía actual. A los generales y oficiales
romanos les gustaba hacer prisioneros, bien para venderlos como
esclavos, bien para exhibirlos durante el desfile triunfal. El dacio
de enorme proporciones expuesto en una de las salas del Museo
Vaticano, pudo ser uno de esos dacios derrotados y capturados tras la
dolorosa derrota.
Alguna lo habeis sentido
Hace 1 hora
No hay comentarios:
Publicar un comentario