En una ladera
junto al Danubio, en la orilla serbia, se ubica Lepenski Vir, un
yacimiento de la prehistoria europea que da nombre a una cultura
ancestral con más de 8.000 años de antigüedad. Hace unos veranos
tuvimos la oportunidad de visitarlo. Intentaré no dejar ningún
lugar de Europa sin explorar, ninguna historia sin recordar, ni
escribir.
El
asentamiento lo podemos contextualizar en la transición gradual de
una economía depredador a un modo de vida más sedentario. Los
arqueólogos lo han interpretado como un asentamiento permanente de
un grupo de pescadores mesolíticos en vía de neolitización. Las
últimas fases se incluyen en la cultura de Starcevo del Neolítico
Antiguo.
Presenta una
superficie de 2.500 m2 excavados, con casas de piedra de
planta trapezoidal de tres a cuatro metros, con hogares formados por
lajas verticales de piedra y numerosas sepulturas.
Se han
excavado 136 tumbas y se han contabilizado hasta 180 individuos, unos
enterrados en posición fetal y otros sentados. Las sepulturas se
disponían paralelas al Danubio.
Lo más
sugerente de la cultura material de Lepenski Vir son las figuras
esculpidas sobre guijarros del río que representan extraños rostros
de exagerados rasgos.
Frente al
poblado, situado en una terraza, emerge el macizo rocoso de mágicas
connotaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario