Caminando la auténtica Galicia
rural, recorriendo el ramal más famoso de la Ruta Xacobea,
peregrinando hacia Santiago de Compostela, con el fin de la Tierra en
nuestro horizonte vital. En Lavandeira una cruz cubierta de musgo
corona un viejo muro de piedra, un símbolo más del paso del tiempo
y de la resistencia titánica del mineral. Los típicos hórreos –
graneros de otra época – van jalonando, a cada pocos pasos, la
senda.
Los mundos desaparecidos de Maël Ollivier-Henry
Hace 21 horas
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