Segundo hijo del rey portugués Alfonso II, Alfonso III aprovechó los problemas externos y la opisición interna que padecía su hermano Sancho II, para desplazarle del trono de Portugal.
Como segundo hijo del rey, Alfonso estaba, desde su nacimiento apartado del trono en favor de su hermano mayor Sancho. Se desplazó a Francia donde contrajo matrimonio con la viuda Matilde de Bolugne, en virtud del cual consiguió el título de Conde Bolougne. Además se convirtió en vasallo del rey francés Luis IX, en favor del cual combatió a los ingleses.
Mientras Sancho había sido excomulgado por el Santo Padre, Alfonso consiguió el favor del Papa Inocencio IV, a través del arzobispo de Braga y el obispo de Oporto, que forzó la salida de Portugal de Sancho II y la entronización de Alfonso, que reinó como Alfonso III (1248 - 1279).
Conocido como "el Reformador" Alfonso evitó caer en los mismos errores que su hermano, y prestó atención y especial cuidado a los mercaderes y a los pequeños propietarios de tierra, lo que venía a ser la clase media, dictando leyes que además evitasen los abusos a los que era sometido el pueblo llano. También es reconocida su labor como reorganizador de la administración y la hacienda.
Reavivió la lucha contra los musulmanes y durante su reinado se procedió a la conquista y ocupación completa del Algarve, siendo el primer reino hispánico en concluir su "Reconquista". Los problemas territoriales con Castilla fueron solucionados definitivamente en 1267 con la firma del Tratado de Badajoz, que establece la frontera entre ambos reinos en el río Guadiana.
Siendo rey repudió a su primera esposa (con la que no había engendrado ningún hijo) y contrajo matrimonio con Beatriz de Castilla, hija ilegítima de Alfonso X el Sabio. A su muerte fue enterrado en el Monasterio de Alcobaça y sucedido por su hijo Dionisio I, que pasaría a la historia como "el rey labrador".
No hay comentarios:
Publicar un comentario