Mostrando entradas con la etiqueta Baños de la Encina. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Baños de la Encina. Mostrar todas las entradas

viernes, 8 de enero de 2016

BAÑOS DE LA ENCINA.



Al amparo del castillo surgió Baños de la Encina, una aldea antigua que se yergue por encima de un inabarcable mar verde de olivos. 


Aunque su origen como lugar de asentamiento se remonta a la Edad de los Metales, es en época andalusí cuando Baños de la Encina nace como localidad en relación con el castillo, seña de identidad del pueblo. 


Objeto de disputas entre moros y cristianos, pasó definitivamente a manos castellanas bajo el reinado de Fernando III. En 1458 fue cedida (junto al castillo) al condestable Lucas de Iranzo y comenzará su desarrollo urbanístico a partir del siglo XVI.


La plaza mayor se constituye desde la Baja Edad Media en el espacio protagonista de la vida social de la aldea y lugar de mercado público. Con la expansión urbana que se desarrolla a partir del siglo XV los diferentes poderes aldeanos van cercando mediante casonas un espacio regular presidido por la parroquia.


La parroquia de San Mateo de época renacentista, y estilo plateresco, es el principal templo católico de la localidad jienense.


Imitando el estilo de la parroquia, la Casa Consistorial de la villa, construida con ladrillo rojizo, data del siglo XVI.



La Virgen de la Encina, patrona de la villa jienense, preside la plaza mayor, y mira de frente la fachada de la parroquia.


Entre Andalucía y la Mancha, el trazado urbanístico de la villa es herencia directa de la Baja Edad Media de Castilla. Una villa castellana en la puerta de Andalucía que no olvida su reciente pasado musulmán.




lunes, 28 de diciembre de 2015

CASTILLO DE BURGALIMAR




Cuatro milenios vigilando el horizonte desde una posición privilegiada, a medio camino entre el valle del Guadalquivir y la planicie manchega, el castillo de Baños de la Encina es uno de los más antiguos de Europa.



Quince torres cuadradas que se adelantan de la imponente línea de muralla, levantada con cal, tierra, chinas de río y agua (una técnica llamada tabiyya), circundan el núcleo histórico de Baños de la Encina, situado en el cerro del Cuerto, que se eleva por encima de los verdes olivares de la campiña del río Guadiel.



El cerco ovalado del castillo, a cuyos pies se desarrolló la vida en los últimos siglos medievales, encierran en su interior vestigios calcolíticos, muros íberos, un espacio sacro romano y una traza almohade, aproximadamente cuatro milenios de historia cuasi ininterrumpida.



El castillo de Baños de la Encina – Bury al Hamman – fue construído en el siglo X durante el gobierno de Al – Hakam II para controlar el paso desde la capital, Córdoba, hacia la llanura manchega, a través de Sierra Morena. El castillo era una más de las fortalezas que jalonaban el camino que unía Córdoba y Toledo.



Una plaza secularmente disputada por su gran importancia estratégica por musulmanes y cristianos a lo largo de sus intestinos enfrentamientos. 


Tras cambiar varias veces de manos, el castillo fue conquistado definitivamente por Fernando III, que lo convirtió en el centro de operaciones desde el que acometer la conquista del norte y centro de la provincia de Jaén.

Este castillo es conocido como "la fortaleza de los siete reyes" pues aquí habitaron ese número de monarcas, entre los que se encuentran Alfonso VII o Fernando el Católico. 





sábado, 19 de diciembre de 2015

PARROQUIA DE SAN MATEO EN BAÑOS DE LA ENCINA.



Cada pueblo, cada barrio tiene su parroquia, lugar de reunión de vecinos desde la Edad Media. La de Baños de la Encina está dedicada a San Mateo de estilo gótico y aires platerescos.





La parroquia fue construida en el siglo XV en estilo plateresco. El atrio de la parroquia se convirtió muy pronto en el centro neurálgico de la vida pública del lugar, pues abría sus puertas a la plaza mayor del pueblo.


La torre campanario de San Mateo es vigía del pueblo y la Virgen de la Encina guardiana de la Parroquia.


domingo, 13 de diciembre de 2015

LA LEYENDA DE DON MARTÍN Y LAS DOS HERMANAS MORAS.



Mitos y leyendas en tierras regadas con la sangre de moros y cristianos. Tras vencer en feroz batalla a las huestes castellanas, el alcaide de Baños de la Encina tomó prisionero a Don Martín, noble burgalés, diestro con la espada y diestro con la palabra.


Esperando a que llegase el rescate, los días fueron pasando y don Martín, gracias a su gallardía, a la destreza con que tañía el laud y el arte con que recitaba poesía, se ganó las simpatías del alcaide y de toda la corte que vivía en el castillo de Burgalimar. De entre todos los habitantes de la ciudad mora, fueron las dos hijas del gobernador, las que con más fervor admiraban a Don Martín, y fervor que mutó en enamoramiento. Tanto tiempo pasó don Martín con las hermosas doncellas, y tanto habló el trovador, que al cabo, ambas chicas decidieron abandonar el Corán y abrazar la fe Cristiana.

Y pasó lo que tuvo que pasar, enterado el padre de las criaturas de la traición cometida, montó en cólera, ni ruegos, ni lágrimas lograron ablandar su corazón y las dos hermanas fueron condenadas a muerte. Comienzan a caminar las desdichadas, escoltadas por la guardia, abandon el pueblo, y ya en la orilla del río, vuelven a tener la oportunidad de volver a la comunidad musulmana. Ellas se negaron una vez más. Se les ató una piedra al cuello y fueron arrojadas al río. Poco después de desaparecer bajo las aguas, emergieron dos enormes rocas que siguen siendo visibles hoy día y el camino que recorrieron se conoce, desde entonces, como la Senda de las dos Hermanas. .


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...