En el año 1617, en plena
Contrarreforma, se construyó en Galicia la pequeña capilla de Santa
Marta. En la ruta que une Redondela con Pontevedra, aquella que
siguen los peregrinos que vienen desde Portugal, se encuentra el
Concello de Vilaboa, a poca distancia de la capital de provincia.
Una sencilla nave de piedra, un
modesto altar, también de piedra, presidido desde la parte más
alta, por una pequeña escultura de Santa Marta.
En su interior nos da la
bienvenida y nos desea buen camino el Cristo da Boa Viaxe. La capilla
situada en Bértola, marca el final del tramo del Camino Portugués
en el Concello de Vilaboa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario