El museo de barcos vikingos de
Roskilde – Vikingeskibs Museet – expone cinco embarcaciones
rescatadas del fondo del fiordo de Roskilde durante una exhaustiva
campaña de excavación en el año 1962.
Durante las últimas fases de la
gloriosa “Era Vikinga”, a finales del siglo XI, se procedió a
construir un sistema defensivo de barreras para proteger la catedral
y la villa de Roskilde (capital del Reino de Dinamarca por aquellos
tiempos).
Los cinco barcos rescatados
proceden de una barrera de aproximadamente 20 kilómetros, situada al
norte de la ciudad. Los barcos se llenaron de piedras y se hundieron
para configurar esta muralla defensiva.
Una sección del museo se dedica
a la construcción de naves, utilizando técnicas medievales y
recrean un dinámico astillero de la época en cuestión.
Conocedores del bosque y de los
distintos tipos de madera, los carpinteros vikingos crearon
eficientes barcos, con los que llegaron a dominar las principales
rutas – marítimas y fluviales - del Viejo Mundo durante cientos
de años.
En toda Escandinavia tienen otro
concepto museístico muy diferente al nuestro, aquí puedes sentirte
un auténtico vikingo, beber su cerveza, remar con ellos, oler la
madera que trabajaban o manejar algunas de sus armas.
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