Ardipithecus
ramidus, un lejano ancestro de la humanidad actual, una especie
difícil de definir, en la que se mezclan los rasgos humanos con los
simiescos. Vivió hace entre 4'4 y 4'1 millones de años en África
Oriental, habitaba profundos bosques húmedos, compartiendo espacio
con grandes mamíferos como colobos y antílopes, y todavía pasaba gran parte de su tiempo en
los árboles. Su dieta incluía frutas y otros productos del bosque
como hojas, raíces, tallos tiernos, brotes, bayas y nueces (la alimentación de Ardipithecus no debía ser muy diferente a la de los chimpancés actuales). Por otro lado, y según
recientes estudios, Ardipithecus pudo haberse internado en la sabana
(o más bien la sabana fue sustituyendo al bosque) y incluso haberla
convertido en su hábitat. Apasionantes enigmas de la evolución
humana.
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