VILLAFRANCA MONTES DE OCA.

Agazapado en la boscosa ladera de la montaña. Punto de partida para encarar los Montes de Oca. Una etapa preciosa y llena de encantos. Toponimo con gran personalidad, como las familias de rancio abolengo. Un sendero rural y pequeños núcleos de población – Tosantos, Villambistia y Espinosa del Camino – nos deja a las puertas de Villafranca.

El nombre de Villafranca Montes de Oca, nos trae a la memoria ecos de su pasado esplendor, cuando llegó a ser sede episcopal. También fue un lugar temido y respetado dentro del trazado xacobeo medieval, al iniciarse allí los Montes de Oca, plagados de bandidos y salteadores. A las afueras de la villa, en Valdefuentes, se encuentran las ruinas de lo que fue un priorato y hospital del Cister del siglo XII. De aquel priorato en la actualidad únicamente queda en pie la Ermita de Valdefuentes.

Iglesia parroquial de Santiago del siglo XVIII. En su interior custodia una talla barroca del Apóstol. Llama la atención su cúpula de estilo riojano, que remata la torre.

Hospital de San Antonio Abad del siglo XVI. Fundado en 1380 por la reina de Castilla Juana Manuel, esposa de Enrique II Trastámara. Conserva una portada de los siglos XV – XVI tras la que se abre el patio con restos del XV. En su momento fue una importante institución jacobea, en la actualidad el edificio se encuentra totalmente restaurado.

Ermita de la Virgen de Oca. Enclavada en un bello paraje, camino de los Montes de Oca, junto al pozo donde la tradición sitúa el martirio de San Indalecio, discípulo de Santiago Apóstol. El segundo domingo de Agosto se celebra aquí una romería.

El tramo [jacobeo] que atraviesa territorio de la Sierra de la Demanda comienza en Villafranca Montes de Oca. Antes de llegar a Villafranca se encuentran los restos del monasterio de San Félix de Oca, donde fue enterrado el conde Diego Porcelos, el fundador de Burgos.

Aunque los primeros asentamientos humanos daten de épocas anteriores, Villafranca debe al Camino francés su actual fisonomía urbana. Villafranca llegó a ser sede episcopal durante el periodo visigodo y contó con activos centros de atención al peregrino, como el Hospital de San Antonio Abad, construido en el siglo XIV, hoy recuperado como hotel rural. A su lado se encuentra la iglesia de origen románico de Santiago el Mayor y cerca del casco urbano está la fuente de San Indalecio, en el lugar donde según la tradición fue martirizado este santo, discípulo del apóstol. Tras salir de Villafranca, el camino se interna en los Montes de Oca. Por el camino aún quedan restos de la labor constructora de San Juan de Ortega, tales como pequeños tramos de calzada [que hemos pisado nosotros mismos] o un puente sobre el río Vena, a él atribuido.

Catálogo turístico. Sierra de la Demanda. Una Historia Total.