LEGENDARIO REY DE LA ISLA ESMERALDA
Irlanda es un tierra
poblada de seres mágicos y héroes legendarios, la existencia de
este tipo de mitos ha forjado, a lo largo de cientos de años, la
personalidad del pueblo irlandés. Brian Boru es uno de ellos.
Difusos son los límites que separan realidad y fantasía, se trata
de la zona donde nacen los sueños y las páginas donde quedan
escritas las inmortales epopeyas de un pueblo.
Brian Boru es un
personaje que vive, si aún vive, a caballo entre la historia real y
la ficción, y que desde su más agitada adolescencia luchó contra
los vikingos que se habían asentado en Irlanda. Era tal su
fortaleza, capacidad y carisma, que llegó a convertirse en el rey de
Munster, un pequeño estado situado en la región más meridional de
la Isla Esmeralda.
Pero la ambición de
Brian Boru no cesaba de crecer, y en 1001 recibió el apelativo de
“Gran Rey de Irlanda”, un título más honorífico que real,
pero en el que subyace una gran carga simbólica. La tradición
quiere ver Brian Boru al artífice de la unión de todos los
caudillos irlandeses, que hicieron un frente común para enfrentarse
a los vikingos.
La Marcha de Brian Boru
es una composión musical tradicional irlandesa, que habitualmente se
toca con arma, aunque hay muchas versiones. Se cuenta que sonaba
cuando el Gran Rey Brian Boru entraba en el Salón del Trono de su
palacio.
El clímax de esta
historia tuvo lugar el 23 de abril de 1014. Su ejército de
irlandeses, que también incluía mercenarios vikingos, del que
formaban parte sus propios hijos, derrotó a las fuerzas vikingas en
la legendaria Batalla de Clontarf. Finalizado el envite, un grupo de
guerreros escandinavos que huían tras ser derrotados, encontraron
por casualidad la tienda donde el Gran Rey de Irlanda se recuperaba
del tremendo esfuerzo que había supuesto derrotar a tan bravos
adversarios. Aprovecharon la ocasión que les había brindado el
destino para asesinar a Brian Boru. Ese mismo día se convirtió en
Leyenda Irlandesa.
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