martes, 27 de octubre de 2020

ERG CHEBBI.



Sentados e ilusionados contemplamos una maravillosa e inolvidable puesta de sol.


Contemplar el mundo desde encima de una duna. Toda la belleza de la creación bañada por los últimos rayos del sol de un atardecer sahariano.


La arena dorada, el viento, los dromedarios, a lo lejos las palmeras del oasis, toda la belleza del mundo cabe en un atardecer dorado junto al desierto.


Nos dejamos embaucar por la imagen romántica del desierto que han diseñado la literatura y el cine.


Una longitud de 22 kilómetros (de Norte a Sur) y una anchura de 5 kilómetros. Sus dunas más altas alcanzan los 150 metros de altura. El lugar ideal para disfrutar de una puesta de Sol. Los rayos del Sol se mueven y la arena va mostrando una variedad cromática. 



Los camelleros locales conducen a los turistas a la parte más alta de la duna desde la que contemplan la puesta de Sol.


Un mar de dunas doradas, paisaje encendido al atardece en el desierto del Sahara, punto de encuentro para viajeros que llegan desde Europa en busca de emociones fuertes.




No hay comentarios:

Publicar un comentario