PRIMATES. SOCIALES E INTELIGENTES.

Sociabilidad e inteligencia son dos cualidades que, en el mundo animal, suelen ir unidas. Los animales más inteligentes tienden a establecer fuertes vínculos sociales con sus congéneros, y en un proceso que se retroalimenta, esas relaciones intervienen en el incremento de la inteligencia. Y los más sociales e inteligentes de todos los animales son los primates.

Salvo unas pocas excepciones, la mayor parte de las especies de primates viven en grupos sociales de gran complejidad. Este integración en grupos bien vertebrados, es una de las claves de la supervivencia de la especie, ya que la vida en grupo aumenta la eficacia en la localización de comida y la defensa ante los depredadores. Como hemos anotado anteriormente, la compleja vida social de los primates está asociada a un notable desarrollo de su inteligencia, entendida como flexibilidad en su comportamiento a la hora de tomar decisiones. Los primates son, junto con los cetáceos, el grupo de mamíferos más encefalizado, es decir, el tamaño de sus cerebros es más grande de lo esperado para un animal de su tamaño corporal.

En relación con esto último, una vida social muy compleja y un comportamiento flexible (no determinado instintivamente) requiere que los primates necesiten periodos de aprendizaje más largos que los del resto de mamíferos. En ese sentido las infancias son más largas, tienen mucho que aprender, tanto para sobrevivir, como para comportarse correctamente dentro del grupo. Además, la prolongación de la infancia comporta otro beneficio añadido, ya que las crías crecen lentamente, la leche materna no precisa ser de gran calidad, lo que evita el estrés alimentario de la madre, y como consecuencia, la mortalidad infantil por desnutrición es menor.

En el caso de la Humanidad, el espectacular desarrollo tecnológico y científico alcanzado durante las últimas décadas, ha venido acompañado de un considerable incremento temporal de las etapas formativas (aquellas que van desde la infancia hasta el final de la adolescencia y los primeros años de edad adulta).