martes, 10 de mayo de 2016

ERMITA EN RUINAS DE SAN LÁZARO.



Huesos descarnados yacen sin sepultura, en un espacio (que fue) sacro. Como San Lázaro volvió a la vida, a una especie de no existencia, pues nada puede morir dos veces. Sus muros cayeron, los santos abandonaron el lugar, mas la piedra sigue ahí, en píe, desafiante, recordando a la Ciudad de los Caballeros, Jerez, misticismo pasados, en un mundo en el que los valores mas altos, no se pagaban con el vil metal.



Situada a extramuros de Jerez de los Caballeros, la de San Lázaro es un de las seis ermitas con las que contaba la población. Se piensa que pudo pertenecer a la Orden del Temple (como no) y es bastante seguro, basándonos en su advocación, que fue un lugar donde se acogía y auxiliaba a los leprosos.


Algunos documentos acreditan que en 1511 ya se encontraba abierta al culto. El terreno circundante era utilizado por los monjes para cultivar pequeños huertos de los que obtener productos frescos para consumo propio y alimentar a los enfermos.




No hay comentarios:

Publicar un comentario