Hace unos 430.000 años
muchos osos, huyendo del frío y buscando refugio penetraron en la
Cueva Mayor de Atapuerca para pasar plácidamente el invierno.
Algunos de ellos se precipitaron al fondo de la Sima de los Huesos y
allí esperaron pacientemente hasta que el equipo multidisciplinar de
Arsuaga los rescatase del olvido. El ejemplar de mayor tamaño
encontrado fue bautizado con el nombre de Isidro. Este Ursus
deningeri es el antepasado del mítico oso de las cavernas que
conocieron los neandertales y los cromañones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario