A veces parece que la
única orden militar que se batió el cobre durante la Edad Media,
fue la Orden del Temple, e incluso en ocasiones, llega a resultar un
poco injusto. Como si hospitalarios, teutónicos, calatravos o
santiaguistas no hubiesen existido nunca, ni combatido ni diseñado
castillos e iglesias. Pues la Orden de Malta, que nació como Orden
Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, nada tiene que envidiarle a
la Orden del Temple. Como muestra de la grandeza de la Orden de
Malta, este precioso sepulcro expuesto en el Museo de Salamanca.
Este monumento
funerario, esculpido sobre piedra arenisca, procede de la Iglesia de
San Juan Bautista de Salamanca. El templo conocido con el nombre de
San Juan de Barbalos fue fundado por varios freires del Hospital de
Jerusalén que habían llegado a la Península Ibérica para combatir
a los musulmanes, y tenían el objetivo de repoblar el barrio donde
se situaba la iglesia. Por otro lado, la misma iglesia se convirtió
en sede de su encomienda.
El valiente caballero parece dormir plácidamente el sueño eterno. ¿Con qué estará soñando en el más allá?.
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