domingo, 11 de noviembre de 2012

LAS MUSAS



Desde el principio de los tiempos, las musas, muchachas jóvenes, hermosas y sencillas han inspirado a músicos, poetisas, artistas, enamorados, escritores, danzantes y bailarinas.
Las musas consiguen encontrar y extraer la belleza del alma humana, los hombres y mujeres iluminados por ellas se convierten en demiurgo, dan forma al arte y arrancan emociones a los espectadores que lo disfrutan. 
 Aunque existen diferentes tradiciones, la más generalizada cuenta nueve musas protectoras de las artes, las ciencias y las letras y que eran hijas de Zeus y de Mnemosine; y nacieron en la cumbre del Piero

"Esto cantaban las Musas que ocupan las moradas olímpicas, las nueve hijas nacidas del gran Zeus, Clío, Euterpe, Talía, Melpóneme, Terpsícore, Érato, Polimnia, Urania y Calíope. Ésta es la más importante de todas, pues acompaña a los venerables reyes. Al que honran las hijas del poderoso Zeus y le miran al nacer, de los reyes vástagos de Zeus, a éste le derraman sobre su lengua una dulce gota de miel y melifluas palabras fluyen de su boca, de modo que todos hacia él dirigen su vista cuando interpreta las leyes divinas con rectas sentencias"
                                                                Hesíodo. Teogonía (75-86)

  Calíope, era defensora de la poesía épica, y solía aparecer representada junto a obras como Ilíada, Odisea o Eneida.

 



Clío, presidía la Historia, el estudio del pasado del hombre.

 Erato, inspiraba a los hombres la poesía lírica, romántica y amorosa. Un laúd y una corona de rosas eran sus símbolos.




Euterpe, la que toca la flauta, estaba especializada en la música. 



 
Melpómene, ataviada con ropas austeras y una máscara, como una gran actriz, era la musa de la tragedia.
Polimnia, con una actitud reflexiva y pensativa, cultiva la poesía sagrada y la mímica.
 





Talía, vestida con extravagantes atuendos provocaba la sonrisa, pues la comedia, era su protegida. Era también musa de la poesía bucólica y pastoril.
  

Terpsícore, la bailarina, patrocinaba la danza.
 
















Urania, escudriñadora de los secretos del Universo, era la musa de la astronomía.
El templo sagrado donde se reunían las musas era el museo, lugar donde disfrutar de todo lo bello del mundo natural y las extraordinarias creaciones del hombre. Mas tarde, el museo se convirtió en un centro de estudios, donde además se rendía culto a las musas. Hoy día un museo es un lugar donde se exponen las obras de arte realizadas bajo los auspicios de las inmortales musas.

Las musas inspiran, protegen y patrocinan todas las actividades intelectuales y espirituales, abandonando todo lo material y sublimando las creaciones que nacen del alma humana. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario