martes, 30 de junio de 2020

MERESANJ, UNA REINA INICIADA




Meresanj abandonó la vida terrenal para comenzar un camino mágico hacia el conocimiento. En este viaje iniciático la reina Meresanj respira la flor de loto que le confiere energía de la primera aurora, se aventura en el pantano primordial y encuentra a Hathor, emergiendo de la exhuberante vegetación. La diosa ofrece la eterna juventud, Anubis la protege y la reina somete a la hiena y al órix. Al término de su recorrido accede al conocimiento de la luz, el conocimiento supremo, transformando la muerte en resurrección.


Merensaj (o Meren Ankh), ella ama a la vida, hija de Kauab, nieta (por tanto de Keops) y esposa del faraón Kefrén. Autoproclamada hija del rey, de su cuerpo, la esposa real, su tumba es uno de los más preciados tesoros que esconde la necrópolis de Gizeh. La tumba es una mastaba de una capilla con tres habitaciones. Aunque sabemos poco de sus acciones como reina, los textos ensalzan a esta mujer excepcional, iniciada en los secretos de Hathor. El interior de su tumba nos invita a que la acompañemos en su camino de iniciación. Diez esculturas convierten la tumba de Merensaj, una cofradía de mujeres, en el centro de culto de una comunidad de sacerdotisas. En pocas civilizaciones de la Antigüedad tuvo la mujer mayor protagonismo que en Egipto.




lunes, 29 de junio de 2020

HECHO DESTACADO: MASACRES DE SEPTIEMBRE DE 1792.




Entre el 2 y el 6 de 1792 se producen las conocidas como masacres de septiembre. Tras los discursos incendiarios de Marat, agitador radical con un punto de violencia en sus palabras, y el permiso tácito del ministro de justicia, George Danton, las turbas populares asaltan las cárceles parisinas y asesinan a unos 1.000 enemigos de la revolución, entre los que se encontraban muchos sacerdotes. Los sans-culottes crean tribunales del pueblo.

sábado, 27 de junio de 2020

LA ESCULTURA DE KEFRÉN.




El mineral es como el faraón, eterno. Los soberanos egipcios no pudieron encontrar un soporte mejor para alcanzar la inmortalidad. Artesanos y escultores expertos hicieron el resto, de manera que cinco milenios después de su muerte, aún podemos mirar a la cara a los reyes del Nilo.


Una de las esculturas más famosas de las que se conservan en el Museo Egipcio de El Cairo es la del faraón Kefrén. Fue descubierta en 1860 por Auguste Mariette en el templo que está situado a los pies de la Gran Esfinge, entre diversos fragmentos de estatuas arrojados en un foso. El material es diorita procedente de una cantera nubia próxima a Abu Simbel.

El arte le ha consagrado creaciones de insuperable grandeza y en el mundo no existe retrato de rey alguno que pueda compararse en majestuosa simplicidad a la imagen tallada en diorita, del rey Kefrén en su trono, existente en el museo de El Cairo.
Pirámides, esfinges y faraones.
Kurt Lange.


La estatua, que mide 1,68 metros, muestra la efigie de Kefrén como dios en la tierra, un faraón entronizado con todos sus atributos, fuerte y poderoso en su máximo esplendor. Postura hierática, mirada distante, como perdida en un más allá próximo, rasgos del rostro muy juveniles e idealizados. Luce el nemes, la barba postiza y el halcón Horus posado sobre su cabeza extiende las alas protectoras sobre el soberano. En los brazos del trono se intuyen unos felinos, probablemente leones, o quizás sean esfinges, de cualquier modo su función protectora y su vinculación con el concepto de realeza parecen fuera de toda duda.



viernes, 26 de junio de 2020

PEOPLE ARE STRANGE.




Chupas de cuero y crestas, una feria en una playa californiana y una cueva en el acantilado, motocicletas, rock 'n' roll y una pandilla de vampiros ochenteros. El recientemente fallecido Joel Schumacher dio una vuelta de tuerca el género de vampiros en 1987. Echo & the Bunnymen homenajearon a The Doos versionando People are Strange, el tema con el que se abre la cinta. Jóvenes Ocultos (The Lost Boys) fue una de las películas que marcaron mi adolescencia, cuando disfrutaba caminando por el lado más oscuro de la existencia.

jueves, 25 de junio de 2020

KEFRÉN, EL HIJO DE RE.




Kefrén, el hijo de Keops, fue sin duda uno de los grandes faraones del Imperio Antiguo. Su complejo funerario en la meseta de Gizeh es una obra colosal y un signo inequívoco de la riqueza y prosperidad que disfrutó el país en aquellos tiempos. Construyó la Segunda Pirámide de Gizeh, de dimensiones ligeramente inferiores a la de su padre. Su nombre Jaefre, significa Ra aparece.

Kefrén sucedió en el trono a su hermano mayor Didufri y es conocido, además de por sus obras en la meseta de Gizeh, por las estatuas suyas que se han conservado, sin embargo no disponemos de mucha información sobre lo acontecido durante su reinado. Documentos importantes como la Piedra de Palermo o el Canon de Turín apenas dicen nada de su época. Manetón, que lo llama Sufis lo coloca como el tercer soberano de la IV Dinastía y le atribuye 66 años de reinado. Actualmente sabemos que no fue el tercer faraón, sino el cuarto y que su reinado no debió durar mucho más de 25 años. Según Heródoto, Kefrén fue continuador de Keops, ambos tiranos detestables. En ese sentido, Kefrén siguió la política absolutista de su padre, lo que le llevó a chocar con los intereses del poderoso sacerdocio (esto explicaría la visión tan negativa que nos transmite Heródoto).

Según Manetón. Kefrén, cuyo nombre egipcio significa «Ra-cuando-se-levanta», reinó sesenta y seis años. La crítica histórica actual solamente le otorga veintiséis. De este faraón nos queda una estatua de diorita que procede del templo del valle de su pirámide de Gizeh y que, a nuestro entender, es la escultura más perfecta del arte egipcio. El rey está sentado en su trono: está realmente vivo. La diorita, una de las piedras más duras, no ha sido un obstáculo para que el escultor consiga plasmar la potente musculatura del monarca. El rostro refleja una completa serenidad. Es el símbolo más perfecto de esa edad cierta en que el rey-dios es la garantía de la felicidad en la Tierra. En la nuca de Kefrén se ha posado el halcón Horus que protege al rey con sus alas desplegadas. Esta alianza entre el hombre y el ave rapaz hubiera podido resultar desagradable, pero tiene un gran poder de seducción. El dios halcón es la fuerza celeste que vela por la institución faraónica. Al mirar ese retrato de Kefrén, se comprende por qué los egipcios consideraban que las estatuas sagradas eran algo animado, porque les abrían la boca durante los ritos de resurrección. El nombre técnico del escultor es, en egipcio, «el que da la vida», y no sobra razón para ello.
Christian Jacq
El Egipto de los Grandes Faraones.

La monarquía rinde culto al Sol. Delante de la Esfinge, que representa al propio faraón Kefrén, se construyó un templo solar dedicado a Keops, con 24 pilares, símbolos de la curva nocturna y diurna del astro rey. En el interior de este templo de halló la estatua del soberano que se conserva en el museo de El Cairo. Kefrén fue el pimer monarca que adoptó el título de Sa-Re, es decir, Hijo de Re. De esta forma el faraón se identifica con Re, pero a la vez es también su hijo (un concepto que recuerda vagamente a la Santísima Trinidad Cristiana). El monarca promovió su propio culto que terminó confundiéndose con el culto de Re.

El reinado del faraón Kefrén (~2472-2448 a. C.) supuso la consolidación del ordenamiento interno del templo funerario real: un vestíbulo que daba acceso a un peristilo por el que se entraba a la parte trasera del santuario, compuesta por cinco hornacinas que contenían retratos del faraón, almacenes y el sanctasanctórum, la parte más sagrada del santuario.
Breve historia de la vida cotidiana del Antiguo Egipto.
Clara Ramos Bullón

El recinto funerario de Kefrén es uno de los más enormes y complejos de toda la Antigüedad. Comprende una pirámide, casi tan colosal como la de Keops, un templo funerario adosado a ésta, una rampa, un templo en el valle, una enorme esfinge con cuerpo de león y cabeza humana (¿su propio rostro?) y un templo solar.

NUBES DE MAGALLANES.




Las Nubes de Magallanes son dos galaxias – Gran Nube de Magallanes y Pequeña Nube de Magallanes – pertenecientes al Grupo Local de galaxias. Estamos ante dos inmensos sistemas estelares situadas en el Hemisferio Sur, llamadas así en honor al explorador y marino Fernando de Magallanes.

miércoles, 24 de junio de 2020

PURGATORIUS CERATOPS.




A finales del Cretácico (hace unos 65 m.a.) vivió en tierras del estado de Montana (Estados Unidos) Purgatorius ceratops, uno de los primates (o protoprimates) más antiguos que conocemos, asignado al grupo de los plesiadapiformes. El hecho de que hayan aparecido restos de plesiadapiformes en Norteamérica y Europa constituye una prueba más de que las dos masas continentales estuvieron unidas antes que el Océano Atlántico las separase. Purgatorius, que tenía la forma de un pequeño roedor, y que probablemente era insectívoro, pudo convivir con uno de los dinosaurios más populares, el hermoso Triceratops.

martes, 23 de junio de 2020

REINA HENUTSEN.




Madre del faraón Kefrén y tercera esposa de Keops. Ocupa la pirámide (G1 - c) que se encuentra más al sur de la Gran Pirámide de Keops. Se conoce poco de la vida de Henutsen y algunos investigadores sostienen que era una de las hijas del faraón Snefru, pero no existen pruebas concluyentes al respecto.

lunes, 22 de junio de 2020

CONVENCIÓN GIRONDINA.



Paul Delaroche - Les Girondins 

Los girondinos controlan la asamblea, llamada ahora Convención Nacional, entre 1792 y 1793. Una de sus primeras actuaciones fue juzgar a Luis XVI por traición y lo ejecutan junto a su mujer (enero de 1793). Esta ejecución provoca que España, Gran Bretaña y Austria (Primera Coalición) declaren la guerra a la Francia revolucionaria. En el interior (zonas rurales), al tiempo que la revolución se hace más radical, estallaron revueltas contrarrevolucionarias protagonizada por campesinos (provincia de la Vendee) y conspiraciones realistas protagonizadas por los antiguos grupos privilegiados.